Casas prefabricadas, una tendencia en expasión

4 de febrero de 2017

Casas Prefabricadas

“El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona” Aristóteles.

En este momento hemos comenzado la comercialización de dos Casas prefabricadas en Antequera, y queríamos desmontar varios mitos sobre este tipo de construcción. A pesar del incremento de seguidores, no deja de ser una decisión que debe ser valorada teniendo en cuenta las ventajas y desventajas de este tipo de edificaciones.

Las principales ventajas son:

  • Plazos de ejecución de obra más cortos. Permite montar la casa desea en un corto espacio de tiempo. Las viviendas prefabricadas son en todo o en gran parte construidas en fábrica, usando técnicas, procedimientos de elaboración industriales, que hacen que estos procesos sean más eficientes en calidad, tiempo y dinero. Como regla general, las casas prefabricadas se hacen en menos de la mitad de tiempo que las tradicionales.
  • Facilidad de producción y transporte.
  • Rigor y calidad de construcción, debido al hecho de que todo el proceso es controlado en un ámbito fabril.
  • Impacto menos negativo en el vecindario y en el medio ambiente, pues la mayor parte del trabajo se realiza en la fábrica, y durante la fase de montaje en el terreno el ruido es reducido. Los sistemas con los que están elaboradas minimizan los residuos generados en obra y aportan soluciones más modernas que las convencionales-
  • Posibilidad de unir módulos, aumentando así las dimensiones del espacio, así como flexibilidad en los cambios y modificaciones entre módulos.

Precios más económicos

  • Teniendo en cuenta las dimensiones, distribución, materiales y acabados, las casa prefabricadas son, de media, entre un 22% y un 34% más baratas que los inmuebles procedentes de obra convencional.
  • Inmuebles personalizados. Una ventaja es la personalización final; aunque la mayor parte de las empresas dedicadas a este producto, utilizan un sistema estandarizado, no obstante, dejan libertad al cliente para elegir acabados, formas y materiales. Lo más difícil para un sistema de construcción modular es hacer espacios diáfanos de muchos metros cuadrados, como salones sin columnas.
  • Eficiencia energética. Otra ventaja de las viviendas prefabricadas es que consumen menos energía que los inmuebles tradicionales. Estas casas suelen llevar incorporados procedimientos de control de calidad muy superior al de la construcción tradicional.

En el caso concreto del aislamiento térmico, el sistema tradicional obliga a que las casas se construyan con puentes térmicos, lo que hace que estos inmuebles presenten porosidades y permeabilidades, lo que genera pérdidas inasumibles de energía. Sin embargo, las casas prefabricadas modulares, poseen capacidad para generar calor por si mismas pues mantienen temperaturas estables inferiores de en torno a 12º y 15º

Las principales desventajas son:

  • Rechazo cultural. La cultura española siempre ha estado unida a la idea de construcción contundente, duradera, con bajo mantenimiento y garantías, lo que ha generado que los clientes asocien “por error y desconocimiento” este tipo de viviendas a casas destinadas a segundas residencias.

En España este mercado se encuentra a años luz de otros países en los que las casas prefabricadas son una realidad. Todos estos prejuicios se deben en gran medida a las empresas low cost de casas prefabricadas, que ofrecen una calidad pésima y por tanto han aportado mala fama a la industria prefabricada.

Mantenimiento

  • La que más mantenimiento necesitan son las de madera, seguidas de las de metálicas y las que menos las de hormigón. Por lo tanto, se desaconseja el uso de madera, dado el alto coste de mantenimiento. El cliente queda limitado a modelos ya existentes, por lo que hay una menor flexibilidad creativa. Al producirse todo el proceso de producción en la fábrica, el cliente ve los módulos cuando ya se encuentran fabricados y listos para el montaje. Al contrario que ocurre con la construcción tradicional, en la que el proceso de construcción puede ser monitorizado.

Restricciones.

  • Existen puntos determinados por los fabricantes que no se pueden alterar, como por ejemplo, altura de las paredes, o longitud de las puertas.
  • Ubicación. La ubicación de la parcela es la principal clave que hace que se encarezca su precio final. Por lo que, las parcelas en suelo rústico tienen un valor de tasación menor. Por tanto, es importante medir el gasto en la parcela y tener en mente el global de la inversión a realizar para no acabar construyendo una vivienda de baja calidad.
  • Las viviendas prefabricadas deben cumplir el Código Técnico de Edificación, y además deben cumplir con la normativa urbanística del terreno.

Conclusión

Aún existe el mito de que las casas prefabricadas son de calidad inferior y este es uno de los principales recelos de quien va a comprar una vivienda así. Sin embargo este es un obstáculo que va perdiendo fuerza día a día, ya que las casas modulares actuales nada tienen que ver con aquellas casas móviles y roulttes del pasado.

Ahora son verdaderas alternativas para aquellos que se encuentran en proceso de adquisición de una casa nueva. Se trata de casas modernas, ecológicas y personalizadas, ideales para clientes con presupuesto más reducido.